El Premio Cervantes 2008 sorprendió a Juan Marsé mientras escribía su novela "Caligrafía de los sueños". Entonces, vinieron los abrazos, los discursos y las entrevistas. Dos años después pudo ponerle punto final al libro, y hace unas semanas, Lumen lo publicó en España. Se trata de su primera obra luego de obtener el premio literario más importante de la lengua española.

"Me gustaría decir que todo es inventado. Me gustaría jurarlo. Porque tendría más mérito, y a menudo más solvencia", dijo Marsé al diario ABC acerca de "Caligrafía de los sueños". Porque se trata de su novela más autobiográfica, con la que ha regresado a su propia infancia.

El protagonista es Ringo, un quinceañero que nació el 8 de enero de 1933, al igual que Marsé. Ambos fueron adoptados debido a azarosas circunstancias, y quisieron estudiar piano, pero no tuvieron los recursos para hacerlo. Ambos, también, son amantes de la lectura. Y si su padre siempre fue un "cierto subtema"en su literatura -como ha dicho el escritor-, en "Caligrafía de los sueños" sale a la superficie con todo su anticlericalismo.

Pero el telón de fondo, el escenario que se trasluce tras estos personajes familiares, es la Barcelona de posguerra. Ese lugar al que ya ha recurrido en libros anteriores, donde hay escasez de comida, y el bando perdedor debe esconder sus ideas. "En alguna página digo que la Barcelona de entonces es 'más inverosímil, pero más real' no sólo porque en verdad a mí me lo parece, sino también para predisponer al lector frente a una ficción que quiere ante todo hacerse creer. No sabría explicarlo mejor", dijo Marsé a El Cultural. No se trata de nostalgia, ha aclarado, aunque la Barcelona de ahora lo aburra un tanto. "Es sólo una escenografía que respeto, porque existió, y porque la necesito para explicar y explicarme algunas cosas".

Juan Marsé (1933) también es autor de "Si te dicen que caí" (1973) y "La muchacha de las bragas de oro" (Premio Planeta 1978). "Caligrafía de los sueños" es editada por Lumen, y llegará a Chile en mayo.